El Comité Electoral Central anunció recientemente la primera ola de casos de destitución, en la cual, en comparación con los 19 casos presentados por grupos civiles para destituir a legisladores del Partido Azul, 9 casos de destitución de legisladores del Partido Verde no pasaron la primera fase. Entre ellos, en los casos de destitución de los tres legisladores verdes de Xinbei, Su Chiao-hui, Chang Hung-lu y Li Kun-cheng, se recogieron un total de 403 firmas de personas fallecidas. Ante esto, la sede del Partido Verde de Xinbei del Partido Democrático Progresista (DPP) criticó ayer (28) al Partido Nacionalista (KMT) diciendo que ¿es el KMT el legendario alquimista? ¿Han resucitado cientos de personas para participar en la recolección de firmas? El equipo de destitución de Li Kun-cheng respondió con una contraofensiva, diciendo que esto se debe a que el DPP está en el poder y la gente está furiosa, “¡incluso los muertos han vuelto a la vida para firmar!” El reportero preguntó tres veces: “¿Es esta una respuesta formal a la entrevista?” El iniciador de la destitución respondió con una burla: “¿Es una broma que la gente esté furiosa con el DPP en el poder?”
El proceso de destitución de legisladores es un mecanismo importante para garantizar la responsabilidad y la transparencia en la democracia. Sin embargo, en este caso en particular, parece que el proceso se ha convertido en una batalla política entre el KMT y el DPP. En lugar de centrarse en los méritos de los casos de destitución, ambos partidos están más preocupados por atacarse mutuamente y desacreditar al otro.
La acusación del KMT de que el DPP ha utilizado “alquimia” para resucitar a los muertos para participar en la recolección de firmas es una acusación grave y sin fundamento. Además, la respuesta del equipo de destitución de Li Kun-cheng de que el DPP está en el poder y la gente está furiosa, es una forma de desviar la atención de los problemas reales y culpar al partido en el poder por cualquier cosa que salga mal.
En lugar de involucrarse en una guerra de palabras, ambos partidos deberían centrarse en abordar los problemas reales que enfrenta la sociedad y trabajar juntos para mejorar la vida de la gente. La política no debería ser una lucha constante entre dos partidos, sino una forma de servir al pueblo y mejorar la sociedad.
Además, es importante recordar que la recolección de firmas de personas fallecidas no es un fenómeno nuevo en la política taiwanesa. En el pasado, tanto el KMT como el DPP han sido acusados de utilizar este método para aumentar el número de firmas en casos de destitución o en elecciones. En lugar de culparse mutuamente, ambos partidos deberían trabajar juntos para encontrar una solución a este problema y garantizar que el proceso de destitución sea justo y transparente.
En conclusión, el proceso de destitución de legisladores es un mecanismo importante para garantizar la responsabilidad en la democracia. Sin embargo, en lugar de convertirse en una batalla política, debería ser una forma de abordar los problemas reales que enfrenta la sociedad. Es hora de que los partidos políticos dejen de lado sus diferencias y trabajen juntos para construir un futuro mejor para Taiwán.